Lanzarse a explorar la Sierra de Tramuntana es una estupenda opción para los viajeros exigentes que siempre andan a la caza de destinos originales. Pasar unos días en un destino tranquilo en plena naturaleza siempre es un acierto para recargar las pilas y volver con fuerzas renovadas al ajetreo de nuestra vida cotidiana.
Cuando pensamos en alquilar un coche en Mallorca lo primero que se nos pasa por la cabeza es coger el bañador e ir a la playa. Es cierto que esta isla alberga muchas calas a las que se puede acceder en coche pero más allá del mar hay otras maravillas que pueden disfrutarse en este paraíso del sol y el buen tiempo.
La majestuosa cordillera de Tramuntana va desde el extremo suroeste en Andratx hasta la punta más septentrional de Formentor. Ha sido reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO así que ya te puedes hacer una idea de su belleza. Este es un fantástico viaje en coche donde la montaña se funde con el azul intenso del Mediterráneo.
Para llegar a esta joya mallorquina lo mejor es que circules por la carretera MA-10. Esta vía serpenteante te conducirá a través de valles y acantilados hasta la mayoría de los pueblos de la sierra y la ruta incluye algunos miradores espectaculares. La desafiante bajada a Sa Calobra o el camino escénico hacia el Faro de Formentor son dos excursiones que realmente merecen la pena.
A continuación, vamos a hablarte acerca de algunos de los lugares más emblemáticos de la Sierra de Tramuntana para que no te quedes sin ideas durante tu escapada:
Valldemossa y su increíble historia
¿Sabías que el pianista Frédéric Chopin pasó un tiempo en Valldemossa? Sin duda este es un dato de lo más curioso en el que puedes profundizar visitando el Museo Frédéric Chopin y George Sand.
Y por supuesto, no hay nada como aprovechar para estirar las piernas paseando por los jardines del rey Juan Carlos I. Muy cerca puedes ver el palacio del Rey Sancho que data del siglo XIV o, si lo prefieres, puedes subir hasta el Mirador de Miranda des Lledoners.
Deià y su amor por el arte
Deià ha sido un imán para artistas, escritores y poetas durante décadas. El más conocido fue el escritor Robert Graves, quien encontró aquí su hogar y su inspiración. Puedes acercarte hasta su tumba con vistas al mar en el cementerio del pueblo.
Sa Calobra y el cañón del Torrent de Pareis
Para llegar a Sa Calobra, deberás tomar un desvío por la carretera MA-2141. Este viaje no es para los temerosos ya que está lleno de curvas vertiginosas, incluido el famoso "Nus de Sa Corbata" o Nudo de Corbata. Al final del trayecto, después de cruzar un túnel peatonal en la roca, descubrirás el Torrent de Pareis. Se trata de una playa entre acantilados descomunales que hará las delicias de cualquier fotógrafo aficionado.
Cabo de Formentor y su faro
Nuestra aventura culmina en el extremo más septentrional de la Tramuntana, el imponente Cabo de Formentor. Lo más reseñable de la zona es el faro erigido en 1863 al que se llega a través de una carretera tallada en la roca. Como imaginarás, las vistas del Mediterráneo son impresionantes desde aquí.
Estos son sólo algunos tesoros que puedes ver en la Sierra de Tramuntana. Lo único que tienes que hacer para conocerlos más a fondo es subirte a tu coche y dejar que la esencia de Mallorca te sorprenda.