Alquilar un coche es algo de lo más habitual pero no siempre sabemos qué debemos revisar durante la recogida y la devolución en la oficina. Vamos a repasar algunos detalles para que todo vaya sobre ruedas y te ahorres sorpresas de última hora.
En una ocasión anterior ya hablamos de las dudas más frecuentes al reservar un coche de alquiler. Esta vez vamos a alejarnos un poco de las típicas cuestiones sobre quién puede conducir el vehículo, la edad mínima del conductor o si es obligatorio dejar una fianza.
Acercarse al mostrador de la compañía de alquiler para recoger o entregar nuestro coche o monovolumen no tiene por qué ser una experiencia estresante. Toma nota de los siguientes consejos que te ayudarán a culminar con éxito las gestiones relacionadas con tu medio de transporte:
Qué hacer al recoger un coche de alquiler
El primer paso para ahorrarte un disgusto es ser puntual. La hora que pusiste al realizar tu reserva, ya fuera a través del comparador de Autofurgo o por teléfono, es la hora a la que te esperan en la oficina. Es importante que no llegues tarde pero si tienes algún imprevisto lo mejor es llames a la oficina correspondiente para informar de tu situación.
Por supuesto, asegúrate de llevar toda la documentación necesaria. Tu DNI o pasaporte, el carnet de conducir y el bono de la reserva son imprescindibles. Y no te olvides de la tarjeta de crédito a nombre del conductor principal para dejar el depósito o fianza. Y, claro está, no se aceptan fotocopias.
Por lo que respecta al contrato y al seguro tenemos que insistir en que antes de firmar nada hay que leer con calma el contrato de alquiler. Si has contratado antes nuestros servicios sabrás que con Autofurgo cuentas con un seguro a todo riesgo y nuestro práctico servicio de Lleno/lleno. Aun así, no dejes que las prisas te jueguen una mala pasada y comprueba las fechas de alquiler, la política de combustible y el resto de las condiciones de servicio.
Por último, toca Inspeccionar el coche. Busca cualquier arañazo, roce, abolladura o golpe que ya tenga el vehículo. ¿Ves algo? Haz fotos con tu móvil. Y, sobre todo, no te vayas sin que un empleado de la oficina lo vea y lo deje anotado en el parte de salida del vehículo. Guardar esa copia es tu garantía.
La hora de la devolución de tu vehículo
Al igual que durante la recogida, la puntualidad es clave. Normalmente, nuestras empresas colaboradoras dan treinta minutos de cortesía para que puedas entregar tu coche de alquiler a tiempo. Pero no olvides que si acudes más tarde se te cobrará un día más de alquiler. Infórmate bien sobre cómo se cuentan los días de alquiler al formalizar tu reserva para evitar sobresaltos.
Por otra parte, el tema del combustible suele ser un punto de fricción bastante común durante la entrega de un coche o una furgoneta de alquiler. Asegúrate de devolver el depósito con el nivel de gasolina que especificaba tu contrato, como ya hemos dicho lo más habitual es lleno/lleno. Para mayor tranquilidad, puedes hacer una foto al indicador de combustible justo antes de dejar el coche.
¿Sabías que las empresas de alquiler también valoran la limpieza del vehículo? No hace falta que devuelvas el coche como los chorros del oro pero sí debe estar razonablemente limpio. Si lo devuelves muy sucio, como por ejemplo con arena por toda la tapicería, es muy probable que te apliquen un cargo extra.
Recuerda que lo ideal es que el personal de la compañía de alquiler revise el coche contigo. Si ha surgido algún percance o hay algún daño nuevo que se ha producido durante tu alquiler, coméntalo. Si hay daños, saca fotos claras donde se vea bien la fecha y la hora para que no haya malentendidos.
Para terminar, no te vayas sin más. Pide siempre un comprobante, un papel firmado o una confirmación por correo electrónico de que el coche ha sido devuelto correctamente y que no hay ningún cargo pendiente. Este es también un buen momento para preguntar cuándo te devolverán o desbloquearán la fianza de la tarjeta.
Saber qué mirar al recoger y entregar un coche de alquiler hace que este proceso sea mucho más fácil para todas las partes implicadas. ¡Sólo tendrás que preocuparte de disfrutar del viaje!