La ruta en coche que pasa por la Sierra de Grazalema viene con muchas curvas. Además de llevarte hasta un parque natural impresionante estas carreteras de montaña también te permitirán llegar hasta bonitos pueblos de casas encaladas cuyo color blanco resplandece al sol. Es un viaje para sumergirse de lleno en localidades con historia y admirar paisajes de vértigo.
Viajando hasta Zahara de la Sierra
Como no podía ser de otra forma, nuestro viaje en coche comienza en la ciudad de Cádiz. Para llegar a Zahara de la Sierra deberás tomar la Carretera de Antequera, es decir, la A-384. El trayecto durará algo menos de hora y media así que puedes visitar esta localidad en un solo día sin problemas. Nunca viene mal tener un plan de reserva por si te apetece improvisar una aventura al aire libre con la familia.
Zahara de la Sierra parece un pueblo de postal. Sus casas se derraman por la ladera de una colina y además está coronado por los restos de un castillo. Subir hasta la Torre del Homenaje de esta fortaleza puede suponer un pequeño esfuerzo pero las vistas panorámicas del embalse azul turquesa y la sierra circundante son una magnífica recompensa.
Grazalema y su entorno natural
Desde Zahara de la Sierra puedes llegar al pueblo de Grazalema propiamente dicho en unos treinta minutos tomando la carretera CA-9104. Esta localidad es el epicentro de la ruta por lo que es un sitio estupendo para bajarse del coche y estirar las piernas.
Pasear por las calles empedradas de Zahara de la Sierra y descubrir su tradición textil es una buena manera de aprovechar el día. Sus mantas de lana son especialmente valoradas y ahora que quedan meses de frío por delante puedes comprar una para arroparte en invierno y mantener a raya a las bajas temperaturas.
Y, por supuesto, el pueblo de Grazalema es la base perfecta para explorar el Parque Natural de la Sierra de Grazalema. Este parque natural andaluz alberga varias joyas como el Pinsapar y la Garganta Verde. Ambas zonas son de acceso restringido así que tendrás que conseguir un permiso antes de ir.
Para llegar al Pinsapar en coche desde Grazalema tienes que salir en dirección a El Bosque. Debes prestar atención y tomar el desvío a la derecha por la carretera CA-531 en dirección a Zahara de la Sierra. Tras circular kilómetro y medio por esta vía encontrarás un aparcamiento habilitado donde comienza un precioso sendero. ¿Sabías que los abetos del Pinsapar han sobrevivido a las glaciaciones?
La otra gran excursión que puedes hacer por la zona es una caminata por la Garganta Verde. Se accede a ella por la misma carretera que conecta Grazalema con Zahara de la Sierra, donde también se encuentra la entrada al Pinsapar.
La Garganta Verde no es otra cosa que un cañón excavado por el río con paredes verticales. La vida que se esconde en su fondo es única y también podrás ver una gran colonia de buitres.
Benaocaz y Villaluenga del Rosario
Saliendo de Grazalema y tomando la A-374 tendrás que conducir algo más de veinte minutos para acercarte a Benaocaz. Este pueblo conserva las evocadoras ruinas de su antiguo barrio nazarí. Y si el paseo cultural te sabe a poco puedes conducir diez minutos más por la A-374 para ver Villaluenga del Rosario. Este es el pueblo más elevado de la provincia de Cádiz y su plaza de toros no se parece a ninguna otra puesto que tiene forma poligonal y está hecha aprovechando la roca natural de la ladera.
Ubrique y la artesanía del cuero
Dejamos atrás las cumbres de Benaocaz para descender hasta Ubrique por la A-374. Esta localidad es más grande y cuenta con una industria más desarrollada que sus vecinos. Ubrique es mundialmente conocida por la fabricación de objetos hechos en cuero así que es un buen sitio para comprar una cartera o un bolso nuevo.
Como has podido comprobar, esta ruta en coche por lo pueblos de la Sierra de Grazalema tiene de todo. Será un viaje lleno de recuerdos imborrables en el que podrás maravillarte con tesoros naturales, ir de compras o recorrer edificios históricos. ¿Qué más se puede pedir?